Dormir hasta tarde, tomar sol como una lagartija, subir peligrosamente los niveles de adrenalina, disfrutar de la naturaleza en pleno, bailar hasta desarmarse y carretear hasta el amanecer, son algunas de las actividades que cualquier vacacionista, chileno o extranjero, puede llevar a cabo en una de las áreas más turísticas del país: la zona comprendida entre las ciudades de Villarrica, Pucón y Lican-Ray.

Cada año, estos tres balnearios del sur de Chile, atraen la atención de miles de visitantes de nuestro país, y del mundo, que buscan olvidarse del vertiginoso ritmo de vida de las grandes ciudades, para sumergirse en unas vacaciones plenas de entretenimientos, aventuras, descanso y, por qué no, de romance.

Si bien es cierto Villarrica, Pucón y Lican-Ray tienen muchas características en común, y a la vez poseen cualidades únicas que permiten que la oferta turística sea más variada, de tal manera que pueda abarcar las diversas necesidades y aspiraciones de los visitantes.

Claro ejemplo de ello es que la oferta turística no termine con el verano, puesto que durante el invierno aparecen por la zona aquellos deportistas y fanáticos del frío y la nieve, del vértigo y la velocidad, que ven superadas sus expectativas "adrenalínicas" en los faldeos del volcán más activo de Sudamérica: el Villarrica.

Villarrica: el corazón del turismo

Enclavada en las riberas del lago del mismo nombre y a un costado del nacimiento del río Toltén, esta ciudad comparte su nombre con dos grandiosas e imponentes bellezas naturales: el lago y el volcán.

Ubicada a 85 kilómetros de la capital regional Temuco, Villarrica se ha caracterizado siempre por ser como un centro operacional para los turistas debido a su ubicación intermedia entre Pucón y Lican Ray, y a los innumerables servicios e infraestructura que posee. Esto lo diferencia marcadamente de los otros dos balnearios, donde algunos servicios sólo funcionan durante la temporada de verano, mientras que en Villarrica lo hacen todo el año.

Esta ciudad tiene un carácter muy particular y a la vez heterogéneo. Indiscutiblemente, la etnia mapuche, se encuentra latente a través de su gente y su cultura; la presencia de la comunidad alemana producto de la inmigración posterior a la pacificación de la Araucanía; la comunidad árabe presente en el comercio de la ciudad y el criollo, resultante de un poco de todos ellos, ha dado como resultado una gente muy cariñosa y atenta con el visitante, preocupada por el crecimiento de su comuna y respetuosa de sus raíces.

La ciudad, dominada por el volcán y bañada por las aguas del lago, debido a sus características de ciudad de paso o de dormitorio para el turista, ha debido redoblar sus esfuerzos para atraerlos. Esto lo ha logrado maravillosamente a través de la realización de eventos de carácter deportivo y cultural de gran prestigio a nivel nacional e internacional.

Tal vez no posea tantas bellezas naturales, sin embargo, esta pequeña gran ciudad ha sabido sacar buen provecho de lo que uno sus habitantes decía: "Villarrica es la puerta abierta al turismo del sur".

Pucón: El centro del sur de Chile

De los tres balnearios, Pucón es el más famoso.

Inserto en la precordillera y a los pies del volcán Villarrica, esta pequeña ciudad llega a triplicar su población en cada estación estival. Se ubica a 27 kilómetros de Villarrica y en su jurisdicción comunal se encuentran los más variados y excelsos atractivos turísticos de la zona: termas, parques nacionales, lagos y lagunas, ríos correntosos, centro de esquí, etc.

El potencial turístico del lugar tuvo su reconocimiento máximo con la construcción en 1934 del Gran Hotel Pucón, marcando el inicio de una actividad que poco a poco llevaría a situar a la ciudad como uno de los balnearios más apetecidos de la zona sur y del país.

Se podría pensar que Pucón está hecho, más que para sus habitantes permanentes, para los turistas. El gran auge inmobiliario de los últimos años con la construcción de lujosos condominios y edificios comerciales, sólo lo confirman.

Un hecho digno de destacar es el esfuerzo que la comunidad puconina realiza para que su ciudad no pierda el encanto y la identidad que la modernidad trae consigo. Esta voluntad se ve reflejada claramente al uniformar ciertos criterios de construcción, al igual que publicitarios. Los letreros de neón están absolutamente "out", y la madera nativa y la piedra volcánica absolutamente "in" en letreros, casas y condominios.

Esto ha llevado a que sus propios habitantes consideren a su comuna como "ecológica", realizando actividades comunitarias tendientes a educar a la gente, y en especial a sus niños, a proteger y cuidar su principal fuente de trabajo e ingresos.

Lican-Ray: La "Flor de Roca" renace en cada estío

Lican-Ray está ubicado en la ribera norte del lago Calafquén (a 27 kilómetros de Villarrica) marcando el límite entre las regiones de La Araucanía y Los Lagos. Nacida como una pequeña aldea hacia los años 40, cuyo nombre en lengua mapuche significa "flor de roca", ya adquiría características de balneario en los últimos años de la década del 60.

¿Qué hace tan encantador a Lican Ray? Quizás el hecho de que como zona urbana nunca haya perdido el aire de rusticidad y paz que tanto buscan algunos turistas y que los hace regresar tantas veces. De tal manera que ni la mayor difusión, ni los eventos de carácter internacional y mucho menos los trazos de modernidad que el desarrollo de la actividad turística trae consigo, han logrado hacer que el pueblo y su gente adopten las costumbres y ritmo de vida acelerado que poco a poco invade las regiones.

El pueblo cuenta con todos los servicios básicos necesarios, tales como movilización intercomunal, servicio de salud, teléfonos, carabineros, supermercados, hospedaje e información turística. Además, cuenta con bellas playas, de gran calidad, en las cuales se practican casi todas las actividades náuticas posibles de realizar en un lago: desde natación hasta velerismo.

No sólo resulta interesante recorrer el pueblo y sus costaneras, o pasar una noche animada en algún pub o discoteca, también puede resultar atractivo recorrer los alrededores y conocer las maravillas naturales de esta zona, expresadas en un magnífico lago, los vestigios de catastróficas erupciones volcánicas, caminos agrestes y pintorescos, etc.

Y si el visitante tiene suerte, tal vez pueda conocer y compartir de un gran asado, el más largo del mundo.

Texto G.Salinas